El hostel es increíblemente hermoso, con una cocina amplia y totalmente equipada, un jardín cuidado y bonito, y habitaciones y camas muy cómodas. La limpieza es impecable y el desayuno es delicioso. El personal es extremadamente amable y te hacen sentir como en casa.

Me sentí como si me trataran como a un rey, no me puedo quejar.

mi experiencia en bogotá fue increíble y mi estadía en cedron superó mis expectativas. las instalaciones son hermosas, especialmente la cocina y los jardines. los dueños, Gabriel y Patricia, son amables y atentos en todo momento. el desayuno es delicioso y las camas son sumamente cómodas. definitivamente volveré!

el internet a veces era lento.

El trato del personal fue excelente, explicando con claridad cualquier pregunta y solventando las dudas. El hostel estaba super limpio y tenía encanto al ser una casa del siglo XVIII rehabilitada. Tenía un bonito jardín con barbacoa y bancos para relajarse tranquilamente. El hostel es seguro, con cámaras en todas las zonas comunes. El wifi llega bien a las habitaciones y zonas comunes y el jardín. Las camas eran muy confortables y te daban una toalla y jabón al registrarte. Las habitaciones son cómodas y luminosas, con ventanas en el techo que les dan un toque especial. Bibiana, la chica del desayuno, es un encanto y muy buena cocinera. Gabriel, uno de los hermanos dueños del negocio, ayuda en todo lo posible y hace la estancia más amena. La cocina tiene una cocina de leña antigua y las vigas vistas de madera le dan al hostel un ambiente rústico bonito. Varias opciones de dormitorios y habitaciones individuales, así como una suite. Recomendado por su relación calidad-precio y trato del personal, limpieza, seguridad y desayuno incluido.

Fue maravilloso, no tengo ninguna razón para quejarme.

El alojamiento es realmente acogedor y limpio. El personal es amable y servicial, siempre dispuesto a ayudarte. La ubicación es ideal para explorar la zona turística. El desayuno es abundante y delicioso. ¡Definitivamente volvería!

Mis díaz en Cedron fueron maravillosos. Me quedé por 3 días y desde que llegué fui recibida con amabilidad y hospitalidad por Gabriel. El hostel es nuevo y conserva el encanto de la historia colonial con una hermosa cocina donde los huéspedes se reunían para compartir y charlar. tuvimos una divertida clase de baile. Me sentí como en casa y vivi muchos momentos lindos, gracias a los dueños y al personal. Recomiendo este lugar a todos los viajeros que busquen comodidad y una ubicación céntrica.

Me encantó sentirme como en casa, el patio y la cocina son aprovechables, las camas son increíbles, Gabriel y Viviana se encargan de hacer de tu estadía una experiencia amorosa, la atención del personal es excelente.

Todo bien.

Excelente atención, habitaciones amplias y cómodas, desayuno variado, ubicación ideal para explorar La Candelaria, ambiente acogedor. No puedo esperar para volver.

Ubicación ideal en La Candelaria

Propietarios dispuestos a ayudar. Desayuno básico incluido.- Habitaciones cómodas y calentitas.- Excelente atención y consejos.- Prestan secador y toallas.- Hostal más lindo de lo esperado.- Clase de baile divertida

Nada, todo bien.

Una casa colonial muy bien restaurada, cerca de los puntos importantes de la Candelaria. Magnífica cocina y jardines. Excelente servicio del personal.

Me sentí muy cómodo, no tengo ninguna razón para quejarme.

El trato del personal excelente. Hostel limpio y con encanto.Seguridad con cámaras en todo el lugar.Camas confortables y habitaciones luminosas.Desayuno delicioso y abundante.

Nada, es perfecto.

me encantó mi estadía en este acogedor y encantador hostel en el centro de Bogotá. El personal fue excelente, siempre dispuesto a ayudar y resolver cualquier duda. El ambiente era tan acogedor, como estar en casa de mi abuelita. Además, la ubicación era perfecta, cerca de los lugares turísticos.

la señal wifi en los dormitorios del ático era débil.

Me sentí como en casa desde el momento en que llegué. Gabriel y Patricia, los anfitriones, fueron amables y serviciales durante toda mi estancia. La cama era increíblemente cómoda y las sábanas estaban limpias. Además, disfruté mucho del desayuno, sobre todo de la deliciosa mermelada de mora. Las instalaciones del hostal eran hermosas, con un estilo colonial encantador. tuve la oportunidad de socializar con otros huéspedes en la cocina, donde nos juntábamos a merendar y charlar. Definitivamente volveré a este lugar en mi próximo viaje.

Recomiendo este hotel, es total.

El personal muy atento y amable. Las instalaciones limpias y encantadoras.Buen desayuno y cocina disponible.Ambiente acogedor y seguro.

No se me ocurre nada.

mi estancia en bogotá fue increíble gracias a cedron. el personal amable y servicial, me sentí como en casa. las habitaciones limpias y cómodas, y el desayuno delicioso. definitivamente lo recomendaría.

solo un pequeño detalle, faltaba un poco de limpieza en los baños.

Mi estancia en Cedron fue maravillosa. Me quedé en este hostal durante dos semanas y me trataron como parte de la familia. El personal fue increíblemente amable y atento, siempre dispuestos a responder a mis preguntas y ayudarme en todo lo que necesitaba. El hostal es una antigua casa del siglo XVIII que ha sido renovada con mucho encanto, y cuenta con un hermoso jardín donde pude relajarme y disfrutar del ambiente tranquilo. Las camas eran muy cómodas y las habitaciones eran acogedoras y luminosas. Además, el desayuno era delicioso y tenía opciones para todos los gustos. Recomiendo especialmente a Bibiana, la encargada de preparar el desayuno, quien siempre cocinaba con una sonrisa y hacía que todo estuviera delicioso. Gabriel, uno de los propietarios, también fue de gran ayuda durante mi estancia. En resumen, Cedron es un hostal con una excelente relación calidad-precio, personal amable, limpieza impecable, seguridad y un desayuno incluido que no te puedes perder.

Recomiendo este hostal, es total.